¿Aparecen los gases un rato después de haber comido? Te aseguramos que no eres el único: se trata de un problema muy común que preocupa a una gran parte de la población. Sin embargo, la mayoría lo lleva en silencio por simple vergüenza.
A continuación, te presentamos una serie de consejos para que te despidas de los gases. Seguirlos es muy sencillo y te ayudará a sentirte más cómodo en tu día a día:
-Come en un ambiente relajado. Evita a tus compañeros de trabajo con los que te sientas incómodo, no quedes para comer con personas que no te hacen sentir a gusto (si es necesario, accede a tomar juntos, sencillamente, un café), busca el momento apropiado del día para estar más tranquilo… La ansiedad dificulta una buena digestión, incluso si estás comiendo alimentos ligeros.
-Come despacio y mastica bien. De esta manera es como el cuerpo asume que debe iniciar el proceso digestivo a tiempo. Para esto, también debes cuidar de tu dentadura, mantener tus piezas dentales sanas, porque, de lo contrario, es posible que ingieras tus alimentos sin haberlos masticado correctamente, y esto podría dificultar la digestión.
-Come entre 4 y 5 veces al día. De este modo, evitarás llegar a la hora de comer con mucha hambre, lo cual puede hacerte caer en la tentación de picar entre horas o consumir alimentos poco recomendados que requieran de una menor preparación que los que conforman una dieta más sana.
-Mantente activo. La actividad física mejora la movilización del gas a nivel digestivo y alivia el posible dolor que causa cuando queda retenido en el intestino. Es tan sencillo como caminar durante 30-40 minutos al día. Además, esto contribuirá a que te sientas mejor, a estar más en forma e incluso, si lo necesitas, a quemar grasas.
-Evita las prendas ajustadas en la zona digestiva. Fajas, pantalones o faldas apretados y cualquier pieza de ropa que impida el flujo del aire por el intestino terminará haciendo que retengas más gases y, por lo tanto, los pasos anteriores no estarían sirviendo de gran cosa.
Como ves, los consejos que te damos son sencillos de cumplir. Aguantar gases no pone en riesgo tu vida, pero sí te hace sentir una innecesaria incomodidad y, además, te hace sentir cohibido en compañía. ¿Por qué vas a pasar por eso, cuando ya cuentas con las claves para evitarlo?