Cuando nos encontramos haciendo plan de adelgazamiento, ya sea porque tenemos un par de kilos que nos queremos quitar de encima o porque estamos en un tratamiento de obesidad, debemos más que nada tener mucha paciencia y no cometer distintos tipos de errores que tienen que ver con mitos que se han construido sobre la pérdida de peso y lo que debemos de hacer para ello.
Una de las cosas que pensamos primeramente cuando pensamos en perder unos kilos, es en achicar las cantidades de alimento que estamos consumiendo y por sobre todo las calorías. Esto quiere decir que en muchos casos las personas suelen hasta dejar de comer por varios días para poder adelgazar. El dejar de alimentarse o quitar algunas comidas del día no hace que adelgacemos de la manera más sana.
Cuando alguien no consume calorías que el cuerpo necesita naturalmente, el organismo va tomando calorías que reserva nuestro cuerpo, pero esta termina afectando a los músculos y a la piel, ya que se produce una falta de tonicidad y elasticidad en los mismos. Bajaremos de peso de manera brusca, pero nuestro cuerpo no presentará una bonita forma y será casi imposible lograr estar firme como hubiéramos deseado.
Por eso lo mejor es comer la cantidad de calorías adecuada que precisa nuestro cuerpo, que ello depende de nuestra altura, edad, actividades que realicemos a lo largo del día y metabolismo. Nosotros mismos no podremos fijar con exactitud cual es la cantidad exacta para consumir, pero no debe de ser menos a 2 mil calorías, en una persona adulta.
Algo que también es importante para bajar de peso es llevar un control semanal, para ver si el plan alimenticio y deportivo, está funcionando correctamente, esto se realiza pesándose una vez por semana y tomando medidas de vientre, piernas y brazos.
Excederse realizando rutinas deportivas no es algo beneficioso para el cuerpo, ya que cuando le exigimos en un día al cuerpo, todo lo que no se le exigió durante años, este tendrá peligro de sufrir fracturas y otros problemas por sobrecarga de esfuerzo, lo que haría que ni bien comencemos a realizar deporte, lo dejemos por intenso dolor y fatiga muscular. Es mejor realizar una breve caminata de media hora todos los días, y tener constancia a un día realizar un tipo de ejercicio que desgarre un músculo.