0

Tipos de prótesis dentales

Existe una amplia diversidad de razones por las que podemos perder nuestros propios dientes naturales: lesiones, caries u otros problemas de salud bucal. Ante este problema, las prótesis dentales suponen una óptima solución. Son un sustituto artificial de los dientes naturales, se fabrican en materiales acrílicos y resina, plásticos especiales y, en ocasiones, metales ligeros, y su sofisticado diseño los hace parecer naturales.

El uso de prótesis dental nos protege y previene de problemas ante los que nos podríamos encontrar con la pérdida de piezas dentales: la caída de los dientes naturales puede llevar a una mala e insuficiente masticación, lo cual podría traducirse en una mala digestión, entre otras dolencias varias. Por este motivo, es importante que mantengas sana toda tu dentadura o, si ya has perdido alguna pieza, que apuestes por las prótesis dentales.

 

Qué tipos de prótesis dentales existen

Completas, superiores e inferiores: Sustituyen todos los dientes naturales. Pueden ser para la fila superior de dientes o para sustituir los de la fila la inferior, según el caso.

Parciales: Se emplean sólo cuando es necesario reemplazar uno o más dientes naturales. Además, ayudan a mantener la alineación de los dientes restantes e impiden su desplazamiento.

De quita y pon: Puede ser total o parcial, y también se refiere a las dentaduras postizas. La principal desventaja de esta prótesis dental es la falta de estabilidad y lo incómoda que puede resultar para algunas personas. Por lo general, se sujeta a los dientes adyacentes mediante el uso de ganchos metálicos, o se pegan lo mejor posible a las encías desnudas.

Este tipo de prótesis dental también puede ir enganchada en el paladar, lo cual afecta directamente a la forma de hablar y al sentido del gusto. Para resolver esto, la prótesis se puede fijar a un implante dental, una medida que mejora la masticación y la estabilidad.

Fijas: Se llaman corona dental cuando reemplaza a un solo diente, y puente dental, si reemplaza varios de ellos. Habitualmente, se fija a uno o más dientes (o implantes dentales). El trabajo se lleva a cabo completamente a mano, y la calidad del resultado depende, en gran medida, del material con el que trabaje el profesional (metal, cerámica, circonio, etc.), el tiempo invertido y el talento del dentista que se encargue del proceso.

Georgina

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *