Si eres friolero y buscas edredones que te abriguen durante toda la noche, los edredones nórdicos son los que necesitas. Los edredones nórdicos están formados por un relleno que se coloca dentro de una funda de tela.
Puede que hayas probado edredones nórdicos distintos y que hayas tenido dos experiencias completamente distintas con ellas. Eso es porque el material del que está hecho el relleno no es siempre el mismo; no todos los rellenos son iguales, así que puedes elegir cuál es el que necesitas.
Para conseguir estar bien calentito durante toda la noche, no dudes que los rellenos de edredones de plumas o de plumón son los mejores. Es cierto que también son los más caros, pero no encontrarás ningún material que te caliente más durante las noches frías de invierno. Además, el calor es completamente natural, por lo que se adaptan al cuerpo de cada persona, algo que no sucede con los materiales sintéticos. Otra de las ventajas de los rellenos de edredones de plumas o plumón es que son transpirables.
Para conocer la calidad de los edredones de pluma o plumón, sean nórdicos o no, nos tenemos que fijar en las etiquetas de los edredones: ahí debería indicarse el lugar de procedencia del ave y la madurez de esta. Lo único que tenemos que saber, que cuanto más madura sea el ave y cuanto más frío sea su lugar de origen, más calidad tendrá la pluma o el plumón y, por tanto, más calentará.
Otro factor que determina la calidad de este tipo de edredones es el peso, que también se indica en la etiqueta (en gramos por metro cuadrado). Cuanto menos pese, más caro será; así, los edredones de plumas serán más baratos que los edredones de plumón, ya que con el mismo peso, el segundo abrigará mucho más.
