La acupuntura lleva muchos años usándose en la medicina tradicional china para combatir diferentes fallos de salud como náuseas, dolores de cabeza, asma o artrosis pero ahora un análisis de la Sociedad Norteamericana de Menopausia (NAMS, en sus siglas en inglés) ha evidenciado que también puede servir para curar los calores de las mujeres con menopausia.
Así se desprende de los resultados de un trabajo que se publicará en la edición de la revista ‘Meno pause’, que analizó más de cien estudios que evaluaban este proceso, de los que solo 12, con un total de 869 participantes, cumplieron con los criterios establecidos para probar efecto.
De este modo, y a pesar de lo positivo eran contradictorios para combatir otros síntomas relacionados con la menopausia, tales como problemas de sueño, cambios de humor o problemas sexuales, vieron que la acupuntura sí afectaba positivamente tanto a la frecuencia como a la severidad de los sofocos.
En las mujeres de entre 40 y 55 años que fueron incluidas en el análisis de Acupuntura Madrid se estudiaron los efectos de diversos pasos de la acupuntura tradicional, incluyendo la acupuntura de la medicina china (TCMA, en sus siglas en inglés), el acu presión, el electro acupuntura, la acupuntura láser y la acupuntura de la oreja.
Y claramente, según admiten los investigadores, ni el efecto sobre la frecuencia o la gravedad de los sofocos parecía estar relacionado con el número de citas o el tiempo del tratamiento.
Sin embargo, los las cifras reflejaron que la acupuntura simulada podría causar un efecto del tratamiento comparable con la de la acupuntura real a la hora de bajar la frecuencia de los sofocos, un beneficio que se mantuvo a lo largo de tres meses.
Aunque el estudio no estudió qué posibles movimiento pueden estar detrás de la mejora, los autores creen que la acupuntura logra bajar los niveles de concentración de beta-endorfina en el hipotálamo, como consecuencia del bajo nivel concentraciones de estrógeno. Unos niveles más bajos que podrían desencadenar la liberación del péptido relacionado con el gen de la calcitonina que afecta a la termorregulación.
“Esta respuesta muestra que aún queda mucho por aprender sobre las causas y tratamientos de los sofocos de la menopausia”
De hecho, un reciente estudio reveló que aproximadamente la mitad de las mujeres que comienzan a experimentar síntomas raros de la menopausia recurren a la medicina alternativa para cambiarlos.
La acupuntura es un método terapéutico que, mediante la inserción de agujas en puntos estratégicos, mejora o cura distintas enfermedades funcionales.
Un poco de historia:
Aunque se originó hace muchos años y llegó a su estado mayor unos pocos años antes de Cristo, puede diagnosticar problemas de salud del siglo XXI, generados por problemas que están lejos de la sociedad campesina en que se originó la cura china. Desde luego, esta medicina lleva el sello cultural de la sociedad que la origino, pero se adaptó fácilmente a la sociedad.
Uno de los puntos claves de la medicina china y uno de los que la hace universal es que es simple. Por ejemplo, las causas de enfermedad, clima, y dieta son tan básicos que pueden ser aplicables a cualquier sociedad y a cualquier tiempo. La cólera, la tristeza, la preocupación son sentimientos humanos tan básicos, que son verdaderamente multiculturales.
Después de la mitad del siglo XX se empezó a profundizar de manera en los efectos generados por la puntura de una aguja en el organismo y se comenzaron a realizar estudios tendientes a demostrar por qué se producían las buenas soluciones. Es así que, a través de novedosa ciencias, como la Neuro-inmune-físico-patología, se pudo conocer cómo los neurotransmisores eran los responsable de conducir la información necesaria para que los efectos biológicos se causaran.
