La nutrición deportiva se basa principalmente en una correcta alimentación, donde el organismo debe recibir las sustancias necesarias para el mantenimiento de la vida. El conjunto de procesos que intervienen en el organismo cuando éste utiliza y transforma las sustancias ingeridas es la propia nutrición. Para que un deportista goce de una buena salud, no sólo ha de practicar deporte, también debe saber cuáles son los alimentos que más le convienen para cada momento de su rendimiento físico.
Los deportistas son personas con un gran desgaste físico que deben reponer antes, durante y después del entrenamiento los nutrientes que se hayan perdido. Por ello hay que tener precaución, ya que una dieta inadecuada puede perjudicar un deportista bien entrenado.
La nutrición deportiva se basa en el conocimiento de los aportes que contiene cada tipo de alimento, para consumir aquellos que se necesiten en cada momento. Los deportistas deben de llevar una dieta equilibrada donde consuman una gran variedad de alimentos, siempre eligiéndolos con un criterio de selección. Cada tipo de deporte desgasta de una forma distinta y trabaja de manera diferente el cuerpo, también hay que tener en cuenta los horarios de entrenamiento y la intensidad de estos.
Los deportistas deben realizar entre 4 y 5 comidas diarias para repartir adecuadamente el aporte de energía y nunca tener sensación de hambre y llegar sin ansiedad a las comidas principales. El ajuste del horario y la cantidad de las ingestas se debe personalizar según el tipo de deportista, pues depende en gran medida de sus circunstancias personales.
Un buen estado de nutrición no se consigue comiendo correctamente los días previos a la competición, esto es el trabajo de una rutina diaria prolongada siguiendo unos hábitos de vida correctos, es por eso que existe formación específica para este fin.
Por otra parte, los deportistas deben estar bien hidratados en todo momento, ya que el agua es el elemento más abundante del organismo y es esencial para la vida. El agua hace que el cuerpo funcione perfectamente, tanto es así que perder un 10% del agua supondría un grave riesgo para la salud. Por lo que un deportista no debe descuidar el equilibrio de los líquidos de su organismo, ya que es esencial para su rendimiento deportivo. Por el esfuerzo físico intenso los deportistas pueden sufrir deshidratación, así que deben de cuidar este factor para mantener en buen estado su organismo.
